Todo comenzó con un sueño que, después de un cuarto de siglo, es una realidad bien tangible. En nuestro caso ni las palabras ni las ilusiones se las lleva el viento. Faltan sólo unos meses para celebrar nuestro 25 cumpleaños. Sí, el tiempo ha pasado volando… pero aquí seguimos dando voz a multitud de generaciones y apoyando al talento joven en su desarrollo personal, académico y profesional.

Este aniversario será una expresión de orgullo para la familia Ledu, por todo lo que hemos conseguido a lo largo de este tiempo. Sobre todo, servirá como agradecimiento a todos aquellos que nos habéis acompañado y permitido llegar hasta aquí (aunque no pensemos detenernos).

Nos adelantamos a la celebración de un año tan especial, como será 2025, reconociendo a aquellas personas que nos harán el honor de ser embajadores de Ledu y nuestros valores.

La primera merecedora de este reconocimiento es María Sarabia, una figura indiscutible del mundo del debate hace décadas. Son muchos sus méritos para lucir en la solapa el distintivo de embajadora de Ledu. Entre ellos, ser la única persona que ha ganado la Liga como debatiente, por la Universidad de Cantabria, y formadora, con la Universidad de Alcalá. Desde su cátedra, además, ha creado su Aula de Debate fomentando el pensamiento crítico en esta institución, impulsando la creación de un torneo nacional y apoyando a Ledu en todo momento. Un corazón de oro por descubrir para muchos, en cuyo pecho palpita, desde ahora, la insignia de Ledu.

Con tal motivo, y por sorpresa, varios representantes de Ledu aprovecharon la celebración de un acto para sorprender a nuestra primera embajadora con la imposición oficial del emblema y la entrega del diploma que la acredita como tal.

En nuestros corazones, lo sabéis, estáis todas y cada una de las personas que habéis construido un discurso de respeto, diálogo y amistad en estos 25 años.